Conoce qué es la tos de las perreras y cómo prevenirla

La tos de las perreras es una enfermedad común y contagiosa que produce una tos persistente que puede confundirse con arcadas y otros síntomas de las vías respiratorias superiores en los perros. Esta puede causar molestias significativas y, en algunos casos, complicaciones graves. Afortunadamente, en la mayoría de los casos, responde muy bien al tratamiento veterinario.

Te contamos cuáles son sus causas, cómo reconocerla y lo más importante, cómo prevenirla:

¿Qué es la tos de perrera?

• La tos de las perreras, también conocida como enfermedad respiratoria infecciosa canina (CIRD, por sus siglas en inglés), kennel cough o traqueobronquitis infecciosa, es una enfermedad respiratoria altamente contagiosa en los perros.
• Consiste en la inflamación de la tráquea y bronquios, lo que provoca una tos seca y áspera que a veces puede sonar como si tu perro tuviera algo atorado en la garganta o hiciera arcadas.
• Puede ser causada por múltiples microorganismos, incluida la bacteria Bordetella bronchiséptica, el adenovirus canino, el virus de la parainfluenza y el micoplasma, entre otros.
•  Se puede presentar en perritos de cualquier edad siendo más severa en cachorros de menos de 6 meses o inmunocomprometidos en los que puede ser mortal.

¿Cuáles son los síntomas de la tos de las perreras?

• Los síntomas aparecen rápidamente dentro de los 3 a 7 días después del contagio.
• El más característico es una tos fuerte y persistente que a veces se acompaña con la expulsión de saliva espumosa muy fácil de confundir con vómito.
• Esta tos aumenta al agitarse, hacer ejercicio o emocionarse. 
• La mayoría de los perros actúan normalmente. Además de la tos pueden presentarse estornudos y secreción ocular y/o nasal.
• En los casos más graves se puede también observar pérdida de apetito, letargia o desgano, dificultad para respirar o fiebre.

¡Cuida a tu regalón!- Mascotas Sodimac | Foto: Igor Normann Shutterstock.com

Causas de la traqueobronquitis infecciosa

• Los perros se contagian más fácilmente cuando se encuentran en condiciones de hacinamiento, como perreras, instalaciones de entrenamiento y exposiciones caninas. 
•  Se transmite principalmente a través de gotitas respiratorias, pero también se puede propagar a través del contacto directo al jugar o al compartir objetos como juguetes, ropa de cama, tazones de agua y comida.
• El período de incubación es de 2 a 14 días, lo que desafortunadamente significa que un perro puede ser contagioso antes de mostrar síntomas.
•  El estrés, las bajas temperaturas y los irritantes inhalados como el humo del cigarrillo, de estufas o chimeneas pueden debilitar las defensas inmunitarias naturales en el tracto respiratorio de tu peludo y, por lo tanto, hacerlo más susceptible a las infecciones.

Prevención de la enfermedad respiratoria infecciosa canina

• Para evitar el contagio es importante reforzar las medidas de higiene en los lugares habitados por más de un perro.
• Mantener una buena ventilación y desinfección de espacios comunes, juguetes, platos, ropa de cama. 
• Para los perros que tienen un alto riesgo de contraer la enfermedad ya sea por razones inmunitarias o porque suelen socializar ya sea en parques, guarderías, exposiciones se recomienda la vacunación como forma de prevención adicional. 
• La vacuna no prevendrá la enfermedad, pero sí disminuirá los síntomas y la duración de la enfermedad en caso de que la contraiga.
• Consulta con su médico veterinario tratante acerca de esta vacuna y evalúa incluirla dentro de su plan anual de salud.

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