De los siete años en adelante tu gato es considerado un adulto mayor y empieza su etapa senior. Te dejamos una guía de los cuidados para tu mejor amigo en esta nueva etapa de vida.
A esta edad puede que el veterinario incluya algunos exámenes extra en su control sano anual con el fin de verificar el estado de sus órganos internos,como hígado y riñones. Además de esto, se le administrarán las vacunas y antiparasitarios correspondientes.
Los gatos en etapa senior necesitan un alimento bajo en grasa y proteínas que no sobrecargue el funcionamiento de su hígado y riñones, pero que sea rico en minerales y vitaminas o ingredientes que les ayuden a mejorar sus defensas, para tener una mejor calidad de vida durante la vejez.
Los gatos deben recibir en forma anual durante toda su vida tres vacunas. Lleva registro de ellas e informa al veterinario.
Además de las vacunas, debe recibir antiparasitarios internos cada 3-5 meses y externos en los meses de primavera-verano. Lleva registro de ellas e informa al veterinario.
En la etapa senior los gatos son aún más sensibles a los virus y bacterias. Si observas que tu gato está decaído, deja de comer, deja de tomar agua, presenta vómitos o diarrea, secreción nasal y/o ocular, tos o cualquier otro signo que te parezca extraño, debes llevarlo inmediatamente al veterinario.
Sin importar la edad que tu gato tenga, siempre debes cuidar su pelaje y piel. Ya sea que tenga el pelo largo o corto, deberás cepillar su pelaje al menos una vez al día. Los gatos están constantemente acicalando y lamiendo su pelaje, al cepillarlo evitarás que trague pelo en exceso y se formen bolas de pelo en su estómago.
El pelaje de los gatos es un indicador de salud, si lo notas opaco o apelmazado puede que esté enfermo. Si es necesario puedes usar un shampoo en seco para gatos o llevarlo a la peluquería para que o bañen, corten su pelo y uñas.
Además de cuidar su pelaje, los gatos necesitan gastar periódicamente sus uñas, procura que tenga a disposición un rascador en buen estado, esto evitará además que rasguñe los muebles y cortinas de la casa.
Aunque en esta etapa son más tranquilos, algunos gatos son bastante demandantes de la atención de su dueño, y tienden a estresarse y presentar conductas como exceso de maullido, vómito o lamido excesivo provocando lesiones y pelones. Para evitar esto juega con él a diario y procura que tenga diferentes accesorios para entretenerse cuando no estés.
Revisa que la caja sanitaria o baño no esté rota ni presente filtraciones. Usa arena sanitaria especial para gatos, esta contiene aglutinantes que facilitan la limpieza de la arena y absorbe los malos olores. Retira a diario, con una pala las heces y bolas de arena con orina de tu gato. Una vez a la semana cambia toda la arena de la caja, y recuerda lavar muy bien tus manos después de hacerlo.
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