Los gatos, esos felinos misteriosos y difíciles de domar, tienen una serie de costumbres que para muchos son desconocidas. Si nunca has vivido con uno o tu contacto con ellos ha sido más bien escaso, entonces te invitamos a leer estas entretenidas costumbres que de seguro te sacarán más de una sonrisa. Y si tienes uno, ¿cuántas de estas cosas hace tu amigo peludo?
- Castañetean los dientes al ver aves. ¿Te ha pasado que ves un gato emitiendo un sonido muy raro al estar mirando un pájaro? Pues si bien no existe un acuerdo sobre a qué se debe, las hipótesis que se barajan es que emiten este extraño ruido debido a la frustración que les provoca el no poder cazarlo. Otra hace referencia a que es una especie de entrenamiento de su mandíbula, para cuando se la puedan comer.
- Te amasan. No, no es que estén preparando pan o alguna masa para agasajarte. Según los expertos, esto se debería a que cuando eran cachorros hacían este movimiento para estimular las mamas de su madre y así hacerlas producir más leche. Después, ya de más grandes, esta costumbre les otorgaría placer y ésa sería la razón por la que lo hacen.
- ¡Un animal muerto de regalo! Sí, okay, estamos de acuerdo en que hay mejores regalos que eso. Pero los gatos suelen hacer esto. ¿Por qué? Aquí tenemos varias hipótesis: te quieren demostrar su habilidad (o sea, están presumiendo) para cazar; el gato sabe que como humano eres muy buena persona pero un pésimo cazador; te está demostrando cuánto te quiere con ese regalito o simplemente quiere compartir contigo su presa, así como tú compartes con él tu comida y abrigo.
- Amor eterno a las cajas, bolsas, clósets, etc. Aquí la explicación radicaría en su instinto depredador. O sea, al meterse en agujeros y lugares más bien recónditos, lo está haciendo porque quiere inspeccionar qué hay allí. Quién sabe, en una de esas es su día de suerte y se encuentra un ratón. ¿La curiosidad mató al gato? ¡No esta vez! También puede ser que solo se las esté dando de vigía, o quién sabe, tramando una emboscada.
- De día duermo, de noche… ¡no! Para ser justos, no es que pasen toda la noche despiertos. Pero a veces les dan los “15 minutos” nocturnos y se vuelven locos corriendo de un lado para otro, como si estuvieran en una especie de competencia para ver quién corre y trepa más rápido. Y tu queriendo dormir, ¿eh? Bueno, se dice que este comportamiento se debe a que son animales nocturnos, que suelen cazar de noche, por lo que lo natural es que a esas horas estén más activos.
- Objeto de deseo: tus pies. Te acuestas y de pronto, tienes a tu gato buscando tus pies para pelear con ellos. O tus brazos. No es que esté enojado contigo o en especial con tus extremidades, sino más bien que a los felinos les llama la atención los movimientos de pies y brazos de los humanos.
- La cama no es el lugar para dormir. Al menos no siempre, no para ellos. En la variedad está el gusto dicen, ¿no? Qué mejor que echarse a dormir una siestecita arriba del teclado de tu computador, o en tu regazo mientras estás trabajando. ¿Por qué? Probablemente porque le gusta estar en lugares calentitos, y también cerca de ti.
- Mi saludo es un ruedo. Llegas a casa, abres la puerta y ahí está él o ella, contornéandose en el suelo frente a tu presencia, rodando sobre sí mismo/a. No, no es un gato-perro. Es tu gato y lo que está haciendo es llamar tu atención.
- Te froto porque eres mío: sí, así no más es. Usualmente lo que hacen es frotar su cabeza contra la tuya, pero también vale si es que es contra tus piernas. No es que tu gato esté feliz de verte, lo que está haciendo es depositar en ti feromonas de familiarización que te dejan marcado. En simple: eres de su propiedad.
- Tony Kamo lo hipnotizó. O se quedó mirando un fantasma. Pero… ¡nooooo! Si eso crees cada vez que ves a tu gato mirando el horizonte, concentrado, como si en ello se le fuera la vida (bueno, las 7), estás equivocado. Los felinos tienen los sentidos más desarrollados que nosotros, por lo que una probable explicación científica a este comportamiento sea que se quedó observando fijamente alguna partícula de polvo, sombra o bichito que para nosotros, pasa desapercibido.
Ahora ya sabes: hay una explicación -o intento de explicación- científica para el comportamiento de los gatos. Si bien hay otras cosas “raras” que ellos hacen, quisimos nombrar las más comunes. Si gustas te animas y nos escribes contando cuál es la gracia de tu gatito. ¡Nosotros también somos curiosos!