2 trucos para perros: el juego del vaso y el truco del equilibrio

En este post te enseñamos 2 divertidos trucos para perro, que te ayudarán a mantenerlo entretenido y a mantenerlo activo y entretenido a través del juego es fundamental para su salud física, mental y emocional. Tanto desde que son cachorros hasta cuando son adultos y sénior: los perros necesitan del juego para su bienestar durante toda su vida.

Beneficios del juego

Si bien cuando son cachorros el juego forma parte de cómo tu perro se divierte y aprende, también lo es para desarrollar habilidades que le resultarán sumamente útiles para cuando sea adulto: pelear, reforzar los instintos como el de presa o caza, saber comportarse y conocer sus límites, tener mejores reflejos, controlar la fuerza, etc. 

Sumado a todo esto, los beneficios de jugar y aprender trucos también son el refuerzo del vínculo entre humano y perro, liberando la ansiedad, generando autoestima y aportando todos los beneficios que trae el ejercicio físico. Pensando en todo esto, te dejamos un par de juegos muy divertidos para que tú y tu peludo puedan disfrutar de un entretenido y sano momento juntos, fáciles de hacer y realizar. ¡Qué mejor! A jugar se ha dicho.

Usa juguetes para disfrutar con tu perro– Mascotas Sodimac | Foto: Uriel Mont – Pexels.com |

Truco para perro 1: El juego del vaso

Vas a necesitar:

3 vasos de plástico duro

Premios o golosinas que a tu perro le encanten  

Empieza el juego usando un solo vaso. 

• Toma una golosina o premio y colócala en la nariz de tu perro.
• Luego, toma el premio y, dejando que tu peludo te vea, colócalo debajo de la taza. 
• ¡Anima a tu mejor amigo a encontrar su golosina!
• Cuando muestre interés en el vaso, ya sea mordiéndolo, golpeándolo con la pata o intentando darlo vuelta, di “¡bien!” y levanta el vaso para que puedas darle su tan anhelado y preciado premio. 

Repite este juego varias veces, hasta que tu peludo realmente lo domine. Cuando eso pase, puedes sumar un segundo vaso. Esta vez, tienes que hacer lo siguiente:

• Coloca la golosina debajo del mismo vaso que has estado usando.
• Mezcla las dos tazas (pero primero asegúrate de recordar cuál es la que tiene el premio).
• Pídele a tu perro que la encuentre.
• Si tu peludo olfatea, patea o intenta volcar el vaso equivocado, coloca tu mano sobre este y anímalo a seguir intentando para encontrar su premio. 
• Cuando encuentre el vaso correcto, dile inmediatamente “¡bien!” y levanta el vaso para que tu perro pueda obtener su recompensa.
• Ahora puedes incorporar el tercer vaso y repetir la operación. 

Ya en esta última etapa, tu perro estará convertido en un superdetective, y debería ser capaz de adivinar dónde está su premio o golosina cada vez.

Recompensa a tu peludo con los mejores snacks– Mascotas Sodimac | Foto: PxHere.com |

Truco para perro 2: El juego del equilibrio

Para este juego, vas a necesitar:

Premios o golosinas de un tamaño más grande y otros de tamaño más pequeño

Lo primero que tienes que hacer para hacer este truco es acostumbrar a tu perro para que apoye su barbilla en tu mano. Para lograrlo tienes que hacer lo siguiente:

• Coloca tu mano debajo de su mentón, y cuando se relaje un poco, dile “¡bien!” y entrégale un premio o golosina de los más pequeños. 
• Repite esto una y otra vez, agregando la indicación “mantén” cuando le pases tu mano. 
• Haz esto hasta que tu peludo acepte y se vea cómodo con tu mano debajo de su barbilla. Luego, dile “mantén” y trata de colocarle un premio de tamaño grande encima de su nariz. 

Es probable que tengas que armarte de paciencia para repetir esto varias veces, pero finalmente, ¡lo lograrán! En cuanto tu perro te permita dejarle su premio o golosina encima de su nariz y mantenerla allí, intenta alejar tu mano, cuenta 2 segundos y dale la instrucción para que se la coma (¡come!, ¡listo!, etc). 

Sin importar la edad todos los perros pueden aprender trucos, el único secreto es la paciencia y repetirlo muchas veces. Si no lo logra en los primeros intentos no te desanimes ni lo retes, ¡sigue intentando!

*Fuente: Barkpost

*Este artículo fue redactado por la veterinaria Paulina Molina. 

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